La vuelta de vacaciones es algo que nos genera estrés tanto a los adultos como a los niños: Dejan de ver a los amigos de verano, vuelven a madrugar, a hacer deberes, a tener actividades extraescolares… Estas y muchas otras cosas son las que hacen que nuestros hijos no tengan muchas ganas de volver al cole (excepto para ver a los amigos). Nosotros, los adultos, debemos estar ahí para ayudarles a afrontar esta situación con ánimo y ganas. Para ello podemos seguir los siguientes pasos:
1. El primer día de cole es el menos largo pero el más estresante: ¡Los pequeños necesitan contarnos cómo ha ido ese día!, interesémonos en lo que nos cuentan: los niños/as nuevos que hay, el profesor/a que les ha tocado, el horario que tienen… No nos centremos solo en los materiales y deberes que deben de hacer, sino dejemos que nos hablen y nos expongan sus puntos de vista de este primer día tan importante en sus vidas.
2. Es bueno que los niños tengan actividades extraescolares: inglés, fútbol sala, gimnasia rítmica… Pero muchas veces no nos damos cuenta de que no tienen tiempo libre para jugar, para descansar, para ellos mismos. Démosles la opción de apuntarlos a aquellas actividades que más les gusten sin saturarlos y dejándoles tiempo libre por las tardes.
3. Por último, en cuanto a los deberes, intentemos ayudarlos en lo que podamos, que sientan que sus padres están ahí para lo que necesiten pero sin hacerles los deberes los adultos. ¡Una pequeña ayuda nunca viene mal!
De esta manera podrás ayudar a tu hijo/a a superar los primeros días de colegio con alegría y entusiasmo. ¡Ánimo y a por el nuevo curso!
Verónica García Trujillo
Psicóloga General Sanitaria